La
ternura caníbal
Páginas
de espuma, 2013
El
título de esta antología de cuentos que firma el mexicano Enrique
Serna (1959) ya apunta a esa ambigüedad y a esa dualidad que rigen
las almas humanas. Un oxímoron que sirve para ejemplificar el
intrincado y hambriento carácter del amor en sus formas más
penumbrosas y contradictorias.
Bastante
conocido en México, ahora Páginas de Espuma ha traído a España a
este escritor con un magnífico volumen de relatos cargados de amor,
humor negro, odios y, como apunta el propio autor, uno de sus temas
capitales: ‘la lucha por el poder en la pareja’. Un mundo
recóndito que se oculta tras la piel de los sentimientos y que Serna
nos permite contemplar en su momento de máxima ebullición. El
egoísmo, la culpa, el odio o la envidia son sentimientos que
componen la compleja amalgama del corazón. El amor, como podremos
comprobar, es antropófago, lo devora todo. Revestido con el traje
del humor más oscuro, Serna consigue hacernos pasar unos estupendos
momentos literarios en los que la angustia y el drama humanos se
convierten en espejos valleinclanescos de nuestra propia realidad.
Los
personajes de La ternura caníbal son seres mediocres,
caricaturizados pero reales, hundidos por sus propias miserias
cotidianas y con aspiraciones que los asfixian y los impelen a
destruir incluso lo que más aman. Son mundanos y están abrumados
por la insatisfacción, la dominación, la soledad, la hipocresía y
las convenciones sociales. Las criaturas que dibuja Serna están
sometidas a sus circunstancias y padecen una especie de determinismo
social. No obstante, y a pesar del terreno limitado que impone el
relato breve, consigue Serna hacer que operen transformaciones en sus
caracteres, dibujando así, personajes espléndidamente matizados y
creíbles que dejarán huella en los lectores.
Hay
en estas páginas juegos eróticos, historias que se mueven con
ironía por la arriesgada frontera de la muerte y la vida, el amor y
el odio.
Por
citar algunos de los cuentos, tanto en ‘Entierro maya, ‘La
incondicional’, y ‘Material de lectura’, asistimos a
matrimonios en descomposición cuya aniquilación supone la salvación
de uno de sus miembros. También se abordan otro tipo de relaciones
menos ‘convencionales’: el amor platónico homosexual, el
intercambio de parejas...
Lectura
altamente recomendable esta ternura omnívora que el mexicano Enrique
Serna ha sabido radiografiar y desnudar en un estilo sobrio pero
acertado, con una dicción precisa y de la que se sirve para
adentrarse como un demiurgo freudiano en los intersticios y recovecos
del alma contemporánea.
Pedro
Pujante
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