Revista de creación literaria en busca de creadores del mundo

miércoles, 30 de abril de 2025

El camarero y la bebé, de M.D. Álvarez

 


Con un donut en la boca y las manos ocupadas por sendas bandejas donde llevaba los cafés con leche y demás viandas a las mesas adyacentes, ¿con qué creéis que atrajo a aquella bebita que caía desde la terraza del restaurante?

Mantuvo el equilibrio y la recogió de forma elegante con su pierna derecha, sin que la preciosa bebé sufriera ningún daño. Es más, la pequeña dijo "ota ve" ante la hilaridad de los allí congregados. Él entregó, después de depositar con delicadeza a tan dulce ricurita en el suelo, los cafés y las viandas mientras se terminaba el donut.

M. D. Álvarez

domingo, 27 de abril de 2025

El olmo, de Enrique Martínez Fernández (Reseña nº 1100)

Enrique Martínez Fernández
El olmo
Diego Marín Editor, 2021
 

No siempre tenemos la oportunidad de comentar esos pequeños cuentos, o relatos, que no son ni tan pequeños ni tan relatos, sino que son algo más que solo se descubre al abrir las páginas que tenemos delante. Y este es uno de los casos, del escritor Enrique Martínez Fernández, también conocido como Eseiko, y como Eseiko Mosaico, depende, supongo, si es su faceta de escritor, músico o ilustrador.

Deberéis entrar en esta breve historia, con ilustraciones a lápiz claramente visibles, breves colores, y mucha fantasía de un evento que todos los años se da entre pájaro, gusano, crisálida y mariposa.

Francisco Javier Illán Vivas

martes, 22 de abril de 2025

La manada del alfa, de M.D. Álvarez


 

Ella finge dormir a pesar del barullo que montan los díscolos cachorritos que corretean alrededor de la lobera. Su padre, un gran alfa, aparece con una pata de búfalo que deja cuidadosamente al percatarse de que ella duerme.

—No estoy dormida —dijo, levantando la cabeza.

Él se acercó, lamiendo dulcemente el hocico de ella. De pronto, uno de los cachorritos irrumpió alborotando.

—Yo me encargo —dijo él, sacando al cachorro con delicadeza. —¿Dónde están tus hermanos? —preguntó el alfa.

—Están jugando ahí fuera.

—Pues vamos fuera. Mamá tiene que descansar.

Fuera, el alfa jugó con sus cachorros, saltando y brincando como uno más.

M. D. Álvarez

viernes, 18 de abril de 2025

Historias y otros desvaríos, de Paco Carrión (Reseña nº 1099)

 


 

Francisco Carrión Galera
Historias y otros desvaríos
ECU Narrativa, 2009

Diez relatos, o diez vivencias, es lo que contiene este volumen del alicantino Paco Carrión, que también podríamos decir cuentos de un hombre sencillo, que vive extrañas aventuras con la tranquilidad de quien parece estar dispuesto a enfrentarse a lo que la vida le depare.

Desde la primera, su "aventura" por Cataluña, especialmente en el Palacio del Conde de la Maresme, al que le facilita los ingredientes para que le den apetito y fuerza sexual, hasta ese inesperado final donde el mismo autor nos sorprende y, a la vez, nos deja un poco perplejos de si cuanto hemos leído es real o no, o son historias, o son desvaríos.

No es, por tanto, un libro para tomárselo en serio, o hacerlo, depende de lo que cada lector quiera interpretar de estas historias o desvaríos. 

Francisco Javier Illán Vivas

martes, 15 de abril de 2025

La galleta, de M.D. Álvarez


 

—Vuela, príncipe, vuela —gritó el chiquillo, lanzando su galleta Príncipe de Bequelar. La galleta voló en un ángulo de 30° efectuando una curva parabólica, pero fue interceptada por un cachorro de lobo que dio un gran salto y atrapó la galleta, devorándola. 

Tras el cachorro de lobo apareció una preciosa niñita que, con sus regordetas manitas, agarró al adorable lobito. El niño, sorprendido, se acercó con cuidado. 

—No muerde —dijo la chiquilla—. Es mi amigo —dijo, acariciando la mullida cabecita del lobito, que, con los restos de la galleta, se deshacía en lametones hacia su dueña. 

—Puedo —dijo el niño, ofreciéndole otra galleta.

M. D. Álvarez

domingo, 13 de abril de 2025

Reportaje presentación de Mil ojos esconde la noche, de Juan Manuel de Prada

 


 




 










 

Fue en la Casa de Cultura de San Pedro del Pinatar, donde el autor estuvo acompañado por Francisco Javier Illán Vivas, quien charló durante más de hora y media con él. Al final, los asistentes pudieron también plantear sus preguntas y el evento finalizó alrededor de las 10 de la noche.

sábado, 12 de abril de 2025

Mil ojos esconde la noche. 1 La ciudad sin luz, de Juan Manuel de Prada (Reseña nº 1098)

 


Juan Manuel de Prada
Mil ojos esconde la noche. 1 La ciudad sin luz
Espasa, 2024

Que de una novela digan que es "quizás el más brillante prosista de su generación. Con Mil ojos esconde la noche, regresa -historia, literatura y refinada mala leche- el Juan Manuel de Prada que nos entusiasmó con Las máscaras del héroe", y no cualquiera, sino Arturo Pérez Reverte. O que esta novela esconde a Cela, Céline, Valle, poco puede añadir este comentarista que lee por placer y que encontrar obras como la que he tenido el placer de leer, me da ánimos a seguir buscando la perfección.

Y es una novela coral, con multitud de personajes, muchos de ellos conocidos y reconocidos, algunos no tan honorables como en la actualidad se les quiere representar, pues eran humanos, y ya lo dice el autor, en la novela, la primera parte y la segunda, que leeré a continuación, se plasma la debilidad humana en toda su extensión, a pesar de que se guarde muchos nombres y muchas perversiones.

En unos tiempos en que los libros que se publican "son cada vez más penosos desde el punto de vista intelectual", encontrarse con una obra como La ciudad sin luz, que ya va por su novela edición, es una bocanada de aire fresco en la literatura, por haber tenido la suerte de leerla y disfrutarla.

Francisco Javier Illán Vivas 

martes, 8 de abril de 2025

El retorno de John Sanders, de M.D. Álvarez (8 de 8)

 



Descendí en la pequeña lanzadera, sintiendo el peso de mi decisión. Al llegar al mundo que tanto amaba, fui recibido con sorpresa y desconfianza. Sin embargo, mi determinación y el poder que había demostrado en la nave comenzaron a ganarme el respeto de aquellos que antes no habían creído en mí.

Angie, al verme, corrió hacia mí con lágrimas en los ojos. "Pensé que te había perdido para siempre", susurró, abrazándome con fuerza.

"Jamás te dejaría, Angie. He luchado contra mi propia familia para proteger este mundo y a ti", respondí, acariciando su rostro con ternura.

Con el tiempo, me convertí en un líder respetado y temido. Mi familia, desde la distancia, observaba con orgullo y tristeza. Sabían que no podían intervenir más, pero también comprendían que había encontrado su verdadero propósito.

Siriel, en su soledad, murmuró: "Hijo mío, siempre estaré observándote, pero ahora sé que eres capaz de proteger lo que amas. Que los hados te guíen siempre".".

Y así, viví mi vida dedicándome a defender a mi mundo y a mi amada Angie, sabiendo que, aunque mi familia estaba lejos, comprendían que mi legado y mi amor estarán siempre con el mundo al que me exiliaron para protegerme.

Fin

M. D. Álvarez

domingo, 6 de abril de 2025

Presentada la Feria del Libro de San Pedro del Pinatar

 


Será el 12 de abril, sábado, con actividades a lo largo de toda la jornada. La presentación estuvo a cargo del concejal Valentín Henarejos Pérez y del escritor Francisco Javier Illán Vivas, en las dependencias de la Biblioteca Municipal de la localidad.

Una veintena de escritores y escritoras se darán cita en el Jardín del Mar Reyes de España, en Lo Pagán, centro casi neurálgico de la actividad festiva y veraniega de la localidad, la mañana del 12 de abril desde las 11 a las 14 horas de la mañana.

Por la tarde, a partir de las 19,30 horas, el invitado en el Salón de Actos de la Biblioteca será el escritor Juan Manuel de Prada, a quien presentará Francisco Javier Illán Vivas y charlará con él alrededor de su obra y de su novela más reciente.

Todas las actividades son gratuitas y, la del Salón de Actos de la Biblioteca hasta completar aforo.


 

martes, 1 de abril de 2025

El retorno de John Sanders (7 de 8), de M.D. Álvarez

 




Me encaré con mis padres y hermanos: "No podíais dejarme en paz. Lo único que os pedí fue que dejarais a ese mundo tranquilo y nada, vosotros ni caso".


"Hijo mío, siempre he estado observando tu evolución y, al ver cómo ponías tu vida en riesgo, no pude menos que actuar. La pérdida de tu brazo izquierdo era un dolor insoportable para mí", dijo la hermosa Siriel.

"¿Y qué si pierdo un brazo? Si lo hago por salvar a la mujer que amo, aún así seguiríais inmiscuándoos en mi vida privada", rugí, airado.

"No te permito que hables así a tu madre", terció mi magno padre, que hasta aquel momento no se había decantado por ninguno de los dos.

"Padre, déjame que le dé un escarmiento", pidió mi hermano mayor con mirada salvaje.

"No", dijo mi padre al recordar por qué expulsó a su querido benjamín. "No te lo permito, fuiste tú quien lo torturó cuando todavía era un precioso bebé", refirió con lágrimas en los ojos. "Los hados ofuscaron mi mente. Te ruego me perdones, hijo mío".

Visiblemente contrariado, permanecí desafiante, pero no colérico. Deseaba volver con Angie, la única persona por la que me dejaría matar si con ello lograba su salvación.

—¿Y qué hacemos ahora? —preguntó mi segundo hermano, visiblemente azorado.

—Un duelo a muerte sin armas —sugerí.

—Pero tu estatura es muy pequeña en comparación con tu hermano y te falta... —No pudo terminar la frase; mi mirada era aterradoramente salvaje. Mi padre, a duras penas, aceptó; temía perder a su pequeño.

Nos encaminamos al exterior de la nave, donde hice gala de mi auténtico potencial. Mi furia se desató y creció, pero también se transformó de una forma que ninguno de los allí presentes hubiera adivinado. La pelea fue brutal, pero conocía los puntos vulnerables de mi hermano; lo inmovilicé y despedacé con mis propias manos.

—Eres el justo vencedor y tienes el derecho de decidir si quieres quedarte o volver a aquel mundo que no te respeta ni te cuida como su guardián —dijo Siriel, sabedora de mi elección.

—Deseo volver al mundo donde me exiliasteis, pero he de deciros que, si volvéis a intentar invadirlo, lo que habéis visto ahora no será nada comparado con mi cólera —dije, mirándolos fijamente con aquellos ojos azules que los taladraban sin compasión. Me giré y abandoné la mega nave en una pequeña lanzadera.

Continuará...

M. D. Álvarez