La vida pasa al revés
La
vida pasa al revés, entre luces
lejanas
de un futuro que la mugre
distorsiona
a través de pulgas
que
insaciables me dan las gracias
a
la hora de cenar.
Entonces
transparentes las mazorcas
buscan
el rastro de sus granos. Hambre
que
evito al celebrar con el vacío
sabor
del último suspiro
que
dejaron endebles
tortillas
agrietadas y verdosas,
que
olvidó la última semana.
Entre
tanto con hambre a cuestas
y
las hojas del sueño
saltando
en las mochilas de los párpados
veo
en el sanitario papel seres
que
sonríen, si bien a bien no sé
porque,
quizás las letras que en mis ojos
bailan
puedan decirme algo
aunque
la radio aclara e informa
que
mañana también
yo
sonreiré...
Pues
escucho que falta poco para
que
el bienestar, caliente la ración
de
piedras que nos toca
en
la olla de su olvido,
apretadas
burbujas que se cierran
alrededor
del cuello de esta cárcel
mal
llamada igualdad...
Si quiere saber
Si
quiere saber
como
vivo... Venga
deje
las palabras, tape su nariz,
acérquese,
esboce algo parecido
a
una mueca, pise con cuidado, aquí
sólo
hay baches, mierda, dolor, hambre, sed...
Sed
de libertad
sed
de agua potable
sed
de una esperanza
sed
de luz, de un poco
de
sol o más bien
sed
de amor que al sueño de cobijo y que
caliente
a la fe
que
en mi alma de nube
habita,
en fin sed de sentirle cerca,
fraternal,
unido a nuestro común
sino.
No
tema está entre
hermanos
¿Lo sabe verdad? O la doble
moral
de vivir a costa de nuestro
sudor
y después voltear a otro
lado,
es su manera de pasar ¿ Y esto
sólo
lo hace para pararse el cuello?
No
tiemble, esta daga es para que sepa
lo
que simplemente es: Una moraleja...
Básico
lenguaje o si usted así
lo
interpreta simple precaución, hay gente
que
harta de estar harta busca en un bolsillo
forastero
un poco de suave esperanza.
Camine
y observe que esta sed es mía
pero
no confunda también es de usted
¿O
es qué no percibe cómo quema el trago
dulzón
y farsante de grises promesas
que
usted con hipócrita sonrisa ofreció?
Espiral
lenguaje que al alma deforma,
y
asfixia al espíritu con su ácida lluvia
que
lava la insomne boca del destino
¡Qué
es suyo!... ¡Qué es mío!...
Violadas palomas
Llevamos
cenizas que al aire
hieren,
tierra gris sin relieve,
doloroso
cauce del alma
herida,
despierta memoria
vestida
de vanas promesas
que
cada mañana transforman
en
vidrio a los pianos, la sangre
los
mares, la sed de justicia
todo
convertido en esquinas
que
a ninguna vuelta recuerdan
permutando
en cruces y en puños
el
hambre que a diario en mis hijos
amanece.
Ramas
de astillados silencios
que
oscuros golpean su rabia
al
leer que el mar de los sueños
llora
torturado al sentirse
derrotado
y solo ante el dulce
frío
de incendiadas espigas
que
un dócil rebaño de ovejas
a
ciegas rastrea entre ebrios
campos
de cordura buscando
la
segura voz que un mendrugo
de
pan
les
da...
Sobre
esa lechosa e inodora
realidad
el vuelo de luces
distantes
reflejan espejos
tiernos,
develando la tierra
que
nunca tendremos y el llanto
roto
de un puñado de bocas,
(desdentada
lluvia cayendo
sobre
las encías del tiempo)
pálidas
cenizas hoy brotan
de
paredes vientos y frutos
de
barro, que un niño sin tierra
amasa
en el nido del hambre
al
despertar solo y sin nubes
entre
amoratadas mañanas
llenas
de violadas palomas...
El duelo
Dos
soberbios políticos a duelo se retaron, poniendo su esqueleto
de
por medio y también su nombre virtuoso y bendecido
por
la perpetua suerte de no haber tenido nunca una conciencia
a
la cual silenciar.
Prepararon
espléndidas palabras llenas de bruma y fuego,
con
sumo cuidado ante su exaltada sombra, estos pensadores
henchidos
de húmedas maderas y con dulce zozobra
aglutinaron
una gran cantidad de personas en torno suyo como broncas lágrimas
surgidas
de la bruma vegetal de una tristeza abandonada,
entre
el gentío había pobres y algunos zopilotes esperando
la
hora de la verdad como el hambriento espera restos de comida
buscando
entre las tapas entreabiertas de la basura.
Con
los sabios relojes aguardando, los humildes miraban al macizo
silencio
que en lo alto custodiaba las sábanas de aquellos dos hermanos,
las
aves sigilosas entre tanto sin mojarse con la roja saliva
de
ingenuos y curiosos observaban a las personas que atrevidas
aun
con el sol oscuro iluminando sus voces todavía abrían
las
eternas ventanas de sus nubes al júbilo.
En
lejanía una moneda caía sobre terrenales almas
y
así la diminuta pero recia oligarquía desde su balcón los hilos de la trama
movía,
sepultando entre las sombras sus ácidas, rastreras marcas.
Mientras
sus marionetas exhibían sus dotes de serpientes
apuntando
a la veta de ajenos corazones,
entre
hilos de tristeza se pudrían los sueños derramados del pasado,
el
sudor de los besos y una luna raída en forma de bandera...
Expectantes
la gente con su brisa seca y una fugaz llovizna en su memoria palpitante
de
insomnios llena, un poco de futuro les pedía, ellos embriagados
por
la ancestral miseria y la neblina de su anémica sangre por delante
humedecían
con silencios las frágiles mentiras
que
de sus bocas sin reparo salían como hormigas envolviendo
al
corazón del mundo
revistiendo
a los mares
de
soledad...
Entonces
resonaron en el aire desvestidos agravios en la lengua
giratoria
de dos turbios profetas
que
al pueblo defendían, circulares palabras
rodando
fatigadas, horadando el contorno de nuestra calma,
llamaradas
de inmóviles balas que traspasaron los jirones
de
niebla que en su alforja la empobrecida muchedumbre
llevaba...
¡Matando
los pañuelos blancos
de
irredentas campanas!
(Este poema está inspirado en una anécdota sucedida en el
México revolucionario, cuando dos candidatos –ambos Generales Revolucionarios-
a gobernador del estado de Tamaulipas, no aceptaron su derrota y entonces se
batieron a duelo en Chapultepec, sin dañarse ellos pero lesionando a varios
espectadores, por lo que ambos fueron aprehendidos, siendo liberados al poco
tiempo, al final uno de ellos se sublevó violentamente, posteriormente al ser
derrotado fue nombrado Embajador en Guatemala)
Enrique
Fernando Arauz Flores, nació en Guadalajara Jalisco, México en
1957. Médico de profesión, escribe desde los 18 años, ha cursado
varios talleres de poesía, hasta el momento tiene cinco poemarios
inéditos y trabaja en el sexto poemario “Antorchas de Viento”,
varios de sus poemas han sido publicados en varias Revistas
Españolas, además este año verán la luz algunos de sus poemas en
dos antologías. Radica en Puerto Vallarta Jalisco.