José Ángel Castillo
El decadente aroma de los puntos suspensivos...
La Rosa de Papel, 2022
Nos habla el autor, en sus "divagaciones" sobre los puntos suspensivos, sobre ese poeta que conoció que llenaba las páginas de puntos suspensivos, al que posiblemente muchos otros conocimos, para pasar al misterio que siempre contienen esos tres puntitos al final de una palabra, de un verso, de un párrafo.
Nos dice que los "obedientes puntos suspensivos son la mágica voz de la experiencia", y puede que en ellos encontremos todo lo que nos falte. La lectura de este poemario, que he tenido el placer de leer dejando a un lado, por unos días, las obligadas lecturas de un certamen literario en el que estoy inmerso, me ha alejado de la cotidianidad, llevándome a la de José Ángel, un autor con el que he tenido la suerte de coincidir muy a menudo en los últimos meses.
Estoy con el autor del prólogo, Victorino Polo García, "escribir un prólogo para una obra literaria siempre resulta empresa de riesgo intelectual elevado, mucho más cuando se trata de un libro de versos". Yo me encuentro con un reto semejante cada semana que traigo un libro de versos a estos no tan abruptos acantilados de papel.
Los poemas van acompañados por espectaculares, y muy apropiados, dibujos de Álvaro Peña que, por sí solos, ya merecerían hacernos con un ejemplar y guardarlo entre los más destacados de nuestra librería personal. Pero además está la voz del poeta, la contundencia de su voz, ese poema que nos pide más jornadas, más días, que no sea una repetición, que no sea de nuevo El día de la marmota. Y que a mi, por lo que hemos hablado él y yo, me ha parecido mucho más cercano y casi personal.
Ya os digo, para conocer y disfrutar a José Ángel Castillo.
Francisco Javier Illán Vivas
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