martes, 30 de junio de 2015

Festival de cultura inquieta 2015

FESTIVAL CULTURA INQUIETA 2015

-Las entradas, a partir de 10 EUR
-Entrada gratuita para los menores de 12 años (excepto Ara Malikian, que es de 4 años)
-A 20' de Madrid centro en transporte público
-Parking gratuito para 1.000 vehículos / Os guardamos dentro las bicicletas
-Un festival para toda la familia

Preguntadnos en festival@culturainquieta.com

MARCUS MILLER / MÁRTIRES DEL COMPÁS / NACHO VEGAS / LA PEGATINA / WHO MADE WHO / ARA MALIKIAN / OSIBISA / SINIESTRO TOTAL / FREEDONIA / EUSKADI SUENA / NASTY MONDAYS / BELAKO /JUANITO MAKANDÉ / LOS MAMBO JAMBO / GEPÉ / NOUMOUCOUNDA CISSOKO / AIDA SAMB / HERRITMO / DURANGO 14 / THE SOUL JACKET / DELGHETTO / GRISES / LITTLE JESUS / ANTONIO LIZANA / PEDRINA Y RIO / ÁFRICA VIVE

lunes, 29 de junio de 2015

Andrés Carlos López nos muestra París con sus pinceles




Pinturas de Andrés Carlos López, que sirvieron para ilustrar algunos de los artículos de nuestra revista nº 3, dedicada a "Siempre nos quedará París".

domingo, 28 de junio de 2015

Hasta el final camina el canto, de Santiago Montobbio (Reseña nº 726)

Santiago Montobbio
Hasta el final camina el canto
El Bardo, febrero 2015

Los poemas y los días, podría ser una definición breve de este poemario. Y el propio autor, en el prólogo, escribe sobre ello: para que exista diario, la única condición es que se trate de una escritura fechada. En el presente libro los poemas van fechados, desde el 31 de julio al 17 de agosto de 2009. Del número 439 al 696.

Ya os he hablado de los anteriores dos volúmenes de Santiago Montobbio, quien regresó un tormentoso 2009 (entiéndase por tormenta creativa) a escribir poesía, sin posibilidad de descanso, como un volcán, -también os lo definí así- y escribió 942 poemas, encontrándose muchos de ellos en los libros La poesía es un fondo de agua marina y Los soles por las noches esparcidos, y ahora, con la publicación de esta serie, nos anuncia que, probablemente, en el próximo, se incluyan los que faltan hasta alcanzar los 942 de tan brillante cosecha poética".

Poemas y días, días de poesía, poesía profecía (recomiendo leer el prólogo escrito por el propio autor, que nos situará en el lugar que este libro ocupa en su obra y en la particular cosecha del año 2009).

Supongo que yo fui uno de los lectores donde germinó la semilla que con el primer volumen, aquel La poesía es un fondo de agua marina, se sembró en los ojos y en el alma de quienes lo leímos, y hemos tenido la suerte de continuar leyendo y ya vislumbramos el final.

Cuando llegue, será el momento de releer los tres primeros para continuar con el que se nos anuncia, y adentrarnos, definitivamente, en lo que aconteció en 2009 en la mente -y en el alma- de Santiago Montobbio.

Me quedo con dos momentos de este libro que, para mi sorpresa, cuando he repasado las notas que tomaba mientras leía los poemas, son parte del primero y del último del libro:

"...ni nunca quise hacer
vida literaria, prefigurándola, aun antes
de probarla, como esclavitud y como espanto,
ritual absurdo de sobervia, navajazos,
burlas, desprecios, falsedades y heridas
sin sentido. ..."

Cuando leí ese fragmento estuve a punto de llamar al autor y decirle, como se lo habrán ya manifestado otros, no te has equivocado en absoluto, tal vez, te has quedado corto.

Y termino, pues el contenido de este poema me es muy grato en este momento de mi vida, cuando ayer, 26 de junio, participé en una fiesta de despedida literaria, con el que cierra el libro:

No vuelven las sombras. Con los días y los poemas
se van, y vienen otras. Son también sombras,
pero otras. La música de las palabras
las retrata, y se suceden como un río
cuya agua es una soledad en la que canta.

Nosotros, Santiago, aguardamos el libro que cerrará un ciclo y que, seguro, ya ha abierto muchas puertas, muchas ventanas, por donde circula tu poesía.

Francisco Javier Illán Vivas

sábado, 27 de junio de 2015

Felah mengus, de Tomás Bravo Vicente (Reseña nº 725)



Tomás Bravo Vicente
Campesino errante
Editorial ADIH, 2015

Creemos los de la capital que somos el ombligo del mundo, que vivimos mejor que nadie y que todos los que están fuera de nuestra querida ciudad interesan bastante poco. Ya decía el bueno de Pío Baroja aquello de <Los nacionalismos se acaban viajando> De esa manera, también nos daremos cuenta de los pros y contras de la gran ciudad, que los hay.
Es cierto que a la hora de ir de compras o al cine tenemos una variedad abrumadora pero no es menos cierto que cuando queremos ir a trabajar el atasco está a la orden del día, también el ataque de nervios buscando dónde aparcar. Si va uno en transporte público se ahorra esos disgustos a cambio de ir como una anchoa en una lata diminuta y, ahora que viene el calorcito, rodeado de un olor que favorece la operación bikini, eso sí. Sin embargo, los protagonistas de los cuentos que se recogen en el libro que hoy recomendamos, les recuerdo, Felah Mengus: campesino errante, de Tomás Bravo Vicente –Editorial ADIH- pueden ir andando a trabajar, si no, en unas circunstancias libres de atascos, de humos abundantes y de nervios a flor de piel. Muchos de ellos verán el amanecer en el trayecto o incluso trabajando y tendrán una mañana plagada de duro trabajo y de paz.
Tengo que reconocer que la lectura de este libro me llegó en un momento en el que la necesitaba especialmente. A punto de rendirme en un asunto personal me topo de bruces con un cuento que me hace ver que cuando uno ha llegado a la mitad del río da igual seguir que volver para atrás porque le queda a uno la misma distancia por recorrer.
A veces, esa lógica aplastante del campesino es tan evidente que los de ciudad no reparamos en ella. Empezamos a dar mil rodeos para afrontar un problema cuando lo más fácil, muchas veces, es buscar soluciones prácticas y sencillas como las que proponen los cuentos del libro.
Los cuentos están divididos en tres grandes temas: Emoción, humor y pensamientos ocultos. En cualquiera de los tres grupos cada cuento tiene su moraleja. No son historias que se cuentan porque sí, se comparten para aportar una enseñanza. En ese sentido, el libro cumple la función original del género y nos remite a ese libro entrañable que nunca olvidaré, El conde Lucanor, de Don Juan Manuel. Un libro que se puede leer con cualquier edad pero que cuanto antes lea uno mucho mejor. Siempre se podrá volver a él en cualquier momento.
Los cuentos del apartado de humor no son chistes exactamente, presentan situaciones con cierta gracia que más que reír nos llevan a una sonrisa cómplice y comprensiva que vuelve a ponernos en sintonía con esa lógica aplastante del labriego que suele ser mucho más sensata que la de los hombres de ciudad.
Me da la sensación de que he escrito mucho del libro sin desvelar absolutamente nada pero me temo que así debe ser. Quien quiera saber más que acuda a él que seguro no le va a decepcionar.
Formalmente es un libro fino, de 160 páginas y pasta flexible y brillante pero de tamaño cuartilla con lo que no está pensado para los bolsillos. Sí que es un libro ideal para llevar en un maletín ya que al ser fino se adapta perfectamente a ese apartado lateral que tienen casi todos los maletines de trabajo y de portátiles. En la cubierta, una escena que anticipa la paz que transmite el volumen. Una alborada, un árbol de hoja perenne, una roca y una chica con un portátil que mira a la pantalla con el horizonte como fondo. Que lo disfruten.

Adolfo Caparrós Gómez de Mercado

viernes, 26 de junio de 2015

Fiesta Equipaje para una noche de verano, en Molina de Segura, Barrio San Roque




- A partir de las 19.30 horas, en el Jardín Huerto Fayrén, Fiesta Equipaje para una noche de verano y III Festival Poetas a Molina, organizados por la Asociación de Vecinos del Barrio de San Roque. El festival está dedicado este año al escritor molinense Francisco Javier Illán Vivas, que presenta el poemario Equipaje ligero, a las 22.00 horas, acto con el que se despide del mundo literario.



Motivos para un cambio de agujas (cogido de un artículo del autor en su Facebook explicando los motivos por los que cree que es el momento de dejar la literatura):

Francisco Javier Illán Vivas (Molina de Segura, 20 de octubre de 1958).
Ha dirigido las revistas literarias Acantilados de papel y Ágora papeles de arte gramático.
Ha fundado la revista literaria Acantilados de papel.
Ha publicado Con paso lento, 2003; La Maldición, 2004 y 2011 (primera entrega de La cólera de Nébulos); Dulce Amargor, 2005; Crepusculario, 2007; El rey de las Esfinges, 2008 (segunda entrega de La cólera de Nébulos)Témporas, 2010; A mi manera, 2012; La Isla y otros relatos, 2013; La oscuridad infernal (2), 2014 (tercera entrega de La cólera de Nébulos); Equipaje ligero, 2015.
Sus poemas han aparecido en cuatro antologías: II Jornadas de poesía sobre el Segura, 2007; Tertuliemos I, 2008; Arde en tus manos, 2009; y República poética, 2009. Sus relatos han aparecido en las antologías: Con la pluma a cuestas: catorce escritores desde La Rioja, 2004; Cuentos, 2006; Los martes de Luna Llena, 2009; París, 2012; 2099 Antología de ciencia ficción, 2012; Los mejores terrores en relatos, 2012; Anatomías secretas, 2013; y Relatos fotoeróticos, 2014; y en las revistas Ágora, papeles de arte gramáticoMiasMa, Lunas de Papel, CuentaMolina, Revista destiempos, y Entrelíneas, entre otras. En Internet sus poemas han aparecido publicados en Revista Literaria Baquiana, Revista Literaria Remolinos y Protheus, entre otras.
Su poesía ha sido traducida al árabe y publicada en Egipto.
Su relato Un hombre desnudo, fue elegido por los internautas del sitio `Escritores en la sombra´ como relato del año 2008.
Finalista del X Premio internacional Sexto Continente de relato de ciencia ficción y ficción distópica, 2012.
Actualmente busca nuevas facetas creativas en el campo de la música.

(Añadimos ahora unas letras de Rosa Campos):
    Y algo más sobre este escritor que ha participado en más medios de los que cita esta breve biografía. Confeso admirador de la narrativa de H. P. Lovecraft y de la poesía de Luis Alberto de Cuenca entre otros autores. 
Si tenemos en cuenta que quienes se mueven en el terreno de la cultura necesitan de algún minuto de presencia en la red  (que no de gloria, latitud ya más complejas de pisar y posiblemente más prescindible),  sin duda que mucha de la gente de la Región de Murcia que lo ha tenido se lo deba  (se lo debamos) a Illán Vivas, porque lleva escribiendo desde hace muchos años sobre estos asuntos, independientemente de que quienes los practican caminen por el reconocimiento y el éxito o por el desconocimiento. Teniendo un marcado peso la labor llevada a cabo en pro de los más desconocidos,  ya que las palabras de sus reseñas y de sus entrevistas han otorgado presencia en el medio de comunicación que más podía (y puede) unir a emisores y receptores culturales sin necesidad de que medien unos costes de promoción.  Todo esto, que considero valioso, es lo que altruistamente ha venido haciendo y hace este escritor  que ha publicado novelas, poesía, artículos, crítica, reseñas, relato, etc., promovido encuentros, divulgando la cultura, facilitando accesos... (Rosa Campos).

jueves, 25 de junio de 2015

Soliloquio de una gárgola

Atardeceres nublados
se reflejan en mis alas
entre vidrios apagados
y el frío de las murallas.

Se pierden en mi memoria
tus daños y tus hazañas,
en paralelo a tu historia
mis recuerdos te acomapañan

Aún llegan de los rincone
los ecos de barricadas
bordadas entre canciones
a Lutecia dedicadas.

Pese a que no te perderé,
ni tú a mí vas a pederme,
por la verdad, confesaré
como yo quisiera verme.

Envidia sana me inspiran
ese muchacho y sus lienzos
que tus calles iluminan
y hacen realidad mis sueños.

Quien partiera de su pincel
por pasear tus bulevares,
imaginarse cual doncel
por el Chatelet des Halles.

 
O bajando por Montmartre,
bailar de mano de Amélie,
y llegando hasta Pigalle,
gozar de alguna meretriz.

Son estas algunas cosas
que de la carne codicio.
Todas son maravillosas
aunque inciten a los vicios.

No me priva sin embargo
tu alta torre de vigía,
esa que a enamorados
De mi amada les desvía:

Mi Señora y mi condena,
que no es vuestra sino mía.
Este amor como la piedra
más de uno lo querría.

A pesar de mis pesares,
me sonríe la fortuna;
no hay parisina que iguale
Notre-Dame bajo la luna.






David Solera Asís, reside en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz. Ha colaborado en guiones teatrales durante sus años de actor aficionado. Ha participado en la revista digital Inventio Magazine y en la revista de la SAINDE. Lleva un blog, Una abubilla en la bahía.